¡Querida lectora, te felicito! ya que lo que llegó a tu pantalla, es una inspiración muy valiosa para vivir más feliz. Un entendimiento profundo de la vida, a través de Historias milenarias de la India con origen en los Vedas.
En ésta sección de pequeños relatos, os traigo mucho más que una simple colección de cuentos, ya que siempre hay algo detrás que lleva a un profundo aprendizaje asociado.
Las personas estamos diseñadas para aprender a través de metáforas y símbolos; llevamos miles de años transmitiendo conocimientos y valores de una generación a otra gracias a historias simples, versos o proverbios para captar la sabiduría que guardan mediante el lenguaje del inconsciente.
Los Vedas son los textos literarios más antiguos conocidos de la literatura India y un punto de inflexión en la Historia del Yoga. Constan de 4 libros en los cuales a través de himnos, colecciones de oraciones y formulas de consagración, transmiten la sabiduría eterna. Éstos libros, han sido cedidos con mucho amor de generación en generación, desde tiempos inmemoriales por los Maestros espirituales. Son así algo como el oro o los diamantes… nunca pierden su valor aún con el paso del tiempo.
Pues bien, el propósito de ésta sección «Historias milenarias de la India» , es exactamente el mismo. Y no es otro que transmitir y aportar conocimientos al lector, sea cual sea su edad y creeencia. Desde los mas pequeños , hasta los más ancianos. Desde los más creyentes hasta los más agnósticos.
Descubriremos los secretos de la vida tal y como es, de una manera simple y amena a través de recopilaciones de fábulas inspiradoras y reflexiones finales , de distintos maestros a los que por supuesto nombraremos, para conseguir una mayor comprensión.
Estos relatos fantasiosos, calarán de un modo directo en la mente y en el corazón de quién se anime a leerlas.
¿ Serás tú una de ellas ?
Necesitamos inspirarnos con éstas historias, sobre todo en los tiempos convulsos en los que vivimos y en una sociedad que a menudo le da la espalda a la genuina espiritualidad y se queda irremediablemente perdida en las redes de lo ilusorio, lo burdo y lo más material.
Ramiro Calle
Y bien, para no dejaros con la miel en los labios, os adelanto una pequeña historia de muchas de las que pronto podréis saborear en ésta sección . ¡Disfruten!
LO QUE HACE EL SABIO
Una madre con su hijo pequeño, se acercó a un » gran alma» , un sabio. Deseaba que conociera a su hijo y le persuadiera de la nociva costumbre de comer dulces.
La madre se quejaba:
– Ya no sé qué hacer con éste chico. ¡No quiere escucharme! Siempre le digo: ¡no comas tanto chocolate y dulces!, no es sano y lo sufrirán tu estómago y tus dientes. Pero ¡nada!, no me hace ningún caso. Quizá si usted le explica que no es bueno, seguramente obedezca.
– Tráeme a tu hijo dentro de tres semanas y entonces le hablaré – Respondió el sabio.
La señora se quedó sorprendida y a su vez un poco enfadada. Pensó : » Que presumido éste Shadu. Sólo debía decirle cuatro palabras al niño, y sin embargo me manda de vuelta dentro de tres semanas… no lo entiendo »
Pero así y todo aceptó al no encontrar otra salida.
Pasadas las tres semanas volvió de nuevo y otra vez le pidió al sabio:
– Por favor, dígale a éste niño que no coma tanto dulce.
Entonces, el sabio instruyó al niño hablándole con gravedad y a la vez con dulzura:
– Tomar mucho azúcar no es sano, no trae nada bueno para tus dientes ni para tu hígado. Es un capricho pasajero y momentáneo para la lengua y el paladar, pero después le hace daño al cuerpo. Recuerda que lo que empezó pareciendo un néctar, al final se volverá veneno… Si escuchas a tu madre y no tomas tantos dulces, con el tiempo te darás cuenta de tu buena decisión.
Entonces el niño, un poco avergonzado, se comprometió a obedecer.
La mujer estuvo agradecida, pero no pudo contener su curiosidad y le preguntó al Sadhu:
– ¿Porqué no le dijo eso la última vez? ¿Porqué nos hizo venir nuevamente?
El hombre sabio le contestó:
– Hace tres semanas, yo mismo era aficionado a tomar cosas dulces. Al renunciar al azúcar y al chocolate, me sentí mejor; entonces, me di cuenta de que verdaderamente no era bueno. Pero antes, dado que yo mismo tomaba dulces, no hubiese podido explicárselo a su hijo con verdadera honestidad.
•Moraleja•
«Antes de enseñar a otros con las palabras, enséñales con tu ejemplo y con tus actos. Del mismo modo que la casa sin cimientos no tiene solidez, tampoco las palabras no confirmadas por los actos tienen mucho efecto»
Swami Prema Rajendra Das
¿Qué reflexión sacas tú de ésta historia? Déjanos tus impresiones en comentarios, ¡te leemos!
NAMASTE
1 comment
[…] de muchas historias, que formarán parte de ésta maravillosa sección a la que hemos llamado: «Historias milenarias de la India». Donde recordemos, dejaremos nuestra mente volar a un mundo lleno de fantasía, que nos hará […]